lunes, 18 de julio de 2011

Piano, piano ...

Escuchando a Yann Tiersen me doy cuenta de lo triste que estoy. Hacía tiempo que no escribía nada en este blog, ahora recuerdo el por qué.

Está siendo un verano atípico, hace un año de todo y un momento de nada. El calor, para mear y no echar gota.

Sin trabajar la vida sabe mejor. Sin obligaciones la vida sabe a helado de menta y chocolate. Sin ti la vida no sabe nada.

Steinburg, curiosa marca para una cerveza. Me pregunto dónde la harán y no encuentro ninguna respuesta sensata. Juro por mi (ya no puedo por ti) que ya no prejuzgaré mas a una cerveza. Que no fumaré.

Qué intentaré ser mejor persona. Es lo que has logrado.



Y mañana será otro día.

1 comentario:

Nieves dijo...

piano piano...
la tristeza es un punto en común entre nosotros, uno mas de los tantos. No me importa que sigas jurando por mi, eso seria buena señal, señal de que al menos las cosas no se han echado al olvido del todo...
Yo si te juro por ti, o por mi si asi me crees mas, que el dolor que siento cuando leo tus palabras no es comparado con ningún otro, ni siquiera con el dolor de un postoperatrio complicado, LO JURO.
Y me dejo llevar... por la agonía, la tristeza, la pena y la culpa de saber que soy yo la causante del mal momento de tu vida... Si tuviera valor, acabaría con todo, también lo juro, pero allá donde fuera no tendría la posibilidad de abrir este blog y leer tus pensamientos, y esa sería la peor eternidad de todas...
No fumes, por favor, pero piensame de vez en cuando, el pensarme es un vicio seguro mucho mas perjudicial, pero asi me llega tu fuerza, y me ayuda......